Creo que si no fuera por el food styling probablemente hoy no sería pastelera.
Eh! para tanto? dirás…y yo te digo que si, porque mi interés por hornear “cositas lindas” empezó con la foto de un cupcake muy bien diseñada para atraer y tentar al espectador.
Esto es en pocas palabras lo que logra el food styling: atraer y tentar a la audiencia con una foto estratégicamente diseñada para tal objetivo.
Muchas fotos que vemos día a día en publicidades, libros, revistas y sobre todo en redes sociales pueden parecer espontáneas y logradas sin esfuerzo pero la mayoría de las veces es todo lo contrario.
Detrás de esa imagen hay una elección meticulosa de la vajilla, la superficie, la iluminación, los accesorios y por supuesto el producto en cuestión, todo calculado a niveles obsesivos para lograr esas tomas tan “naturales” que nos hacen desear sentarnos a la mesa para disfrutar esos platos, esos postres o esas bebidas refrescantes.
Hace unos años cuando empecé a pensar qué hacer de mi emprendimiento, qué identidad quería tener, cómo quería que me reconozca la gente y demás, busqué la ayuda una de las mas grosas food stylists de la industria nacional: Paula Masoero (@paula_foodstyling) y juntas fuimos armando un moodboard para mi marca, ella me enseñó muchísimo que no conocía sobre los procesos, planning y técnicas que sucedían previo a tomar esa foto tan especial que representaría a una marca, un producto, un mood, etc.
Y así fué cómo empecé de a poquito a meterme en este mundo, que no es 100% mi mundo, pero me agrada muchísimo, y obvio que puedo llegar a obsesionarme a niveles extremos cuando algo me copa.
Es así como fuí practicando -y sigo practicando- todo lo aprendido y siempre hay algo más que aprender, por eso hoy te comparto algunas de esos aprendizajes básicos para irse metiendo en el maravilloso universo del food styling.
- Planéa antes de sacar fotos: parece una obviedad pero a veces cocinamos algo súper lindo y cuando nos ponemos frente a la cámara no sabemos cómo corno hacerlo lucir. Para eso vamos a buscar inspiración: Instagram, Pinterest, revistas: todo vale. Vamos a recopilar esas imágenes que nos agradan y serán la inspiración -y remarco inspiración, no copia-
- Cociná todo lo que puedas antes: yo no cuento -y probablemente vos tampoco- con un súper estudio de fotografía, la mayoría de nosotros sacamos fotos en nuestras cocinas o talleres por lo cual si estamos cocinando y sacando fotos, primero que se nos va la mejor luz del día mientras cocinamos y segundo que no nos da el espacio físico para trabajar cómodos.
- Buscá a tu/s héroe/s: se le dice así a las piezas que salen más bonitas y “foteables”, por ejemplo de una docena de muffins seguramente no vayas a sacarle fotos a todos sino que vas a elegir y sacarle fotos a los que hayan salido más parejos, con colores más lindos, donde se vea bien el relleno y sean armoniosos en sus formas y proporciones.
- Definí tus áreas de trabajo: nunca, nunca jamás abras un contenedor con salsas, líquidos o preparaciones que puedan derramarse en el set de fotos, siempre tenés que tener un área de preparación de los alimentos, donde los vas a -doh!- preparar para las fotos, les vas a dar amor y cuidados para que sean la estrella de la escena. Pensá que si tenés un hermoso repasador blanco y de golpe se te cae un pote con jalea de frutos rojos…será muy difícil que puedas usar ese repasador para la toma, mejor preparar todo en otro lugar y llevarlo cuando esté listo al set.
- Usar substitutos para armar la escena: no quisiéramos arruinar nuestro “héroe” manipulándolo de acá para allá pero también nos gustaría ver cómo “juega” ese elemento en la escena con la iluminación, los props, los fondos, etc. por lo cual podemos usar uno de esos muffins “no tan lindos” para ver todo eso, y cuando llega el momento de la foto reemplazarlo por el producto final todo bello.
- Organizá: una vez que tengas la inspiración definida buscá tus fondos, tus props, tus textiles y prepará todo en una mesa o área donde puedas ir fácilmente a buscar e intercambiar piezas, así como tenemos que preparar la comida con anticipación, también el set para que el día de las fotos sea sólo eso: styling y fotografiar. Creeme que puede ser muy desafiante y consumir mucho tiempo solamente esa parte como para estar buscando todos esos recursos en el momento para hacer que la toma funcione.
- No compres todo lo que ves: y esto me pasa a mi tooooooodo el tiempo, me pierdo en bazares, en casas de tela, en internet…y la realidad es que no necesitás tener una montaña de cosas cuando arrancás, probablemente tener unos básicos neutros como platos, cubiertos, servilletas y 2 o 3 fondos ya será suficiente. Cualquier cosa puede ser usada como prop, desde una bandeja de cookies hasta las tazas de té de la abuela -claro está, que siempre cuando tenga que ver con el mood de la escena, no hagamos cocoliche por favor!-
- Empezá con el equipo que tengas: no necesitás comprarte la mejor cámara profesional del planeta, ni todo un equipo de iluminación profesional, con tu celular, una ventana y un foamboard blanco podés hacer un montón de cosas y lograr resultados realmente buenos. Asegurate de sacar tus fotos cerca de la ventana, si tenés una cortina blanca un poco translúcida tanto mejor para que suavice la luz, la mejor hora suele ser durante la mañana o por la tarde luego del medio día, dependiendo siempre del resultado que quieras obtener, quizás si te copan las sombras mas duras y definidas al medio día con una luz bien fuerte vas a tener ese estilo de fotos.
Espero que -si compartís mi pasión por el food styling -este post te sirva como para arrancar y si tenés dudas o te gustaría que te cuente más en detalle alguna de las partes involucradas en sacar fotos increíbles me lo dejes en los comentarios!
Y para partir te voy a dejar un challenge con el cual despertar tu creatividad y talentos a la hora de fotografiar alimentos.
Elegí un producto, puede ser una manzana, un muffin o cookies y sacale una foto cada día durante una semana pero siempre tratando de sacar una foto distinta, vas a ir jugando con texturas, colores, la iluminación, el ángulo de la cámara y examiná bien cada resultado, estoy segura que al final de la semana vas a ver resultados muy interesantes! Si te animás podés compartirlo por mail o publicar en redes con el hashtag #miluphototips
Nos leemos, un beso!
